Cartas Marcadas
Por Voyerista Comenta
¡Auxilio Manuel, auxilio?
La situación en el estado de Guerrero está como para cocer bollos y por ende, el gobernador del estado, Ángel Heladio Aguirre Rivero, está poniendo sus barbas a remojar. Y acude con sus amigos, para muchas cosas, pero principalmente, para tener la otra versión de las cosas, luego de que a su alrededor, tiene puros aduladores.
En efecto, los policías comunitarios, los autodefensas, los municipales, quienes no tienen fecha para su reingreso laboral, la violencia social, la delincuencia organizada y la común, que han rebasado por todos los sentidos y formas a la autoridad local, municipal y federal, las demandas que dejaron las tormentas tropicales Manuel e Ingrid, que el pasado 14 de septiembre llegaron al estado de Guerrero, y destruyeron lo poco que quedaba bueno de infraestructura y que aún no tienen viabilidad ni fecha para solucionarse, los ancianos que reclaman respuestas, la carencia de obras sociales y las que se iniciaron, pero que no se les ve fecha en el calendario para estar listas, como el Acabús y el Megatúnel, obras detenidas por la impericia social y política de un gobierno, que no hace ni deshace. Todo lo anterior, ha provocado un caldo de cultivo para la violencia.
En fin un escenario casi catastrófico, que amenaza en convertirse en la tumba política de muchos, que actualmente gobiernan. Fue al parecer la justificación que motivó que el pasado viernes en conocido hotel de Acapulco, se reunieron el actual gobernador Ángel Heladio Aguirre Rivero y el actual diputado federal plurinominal Manuel Añorve Baños, para platicar.
La plática, en efecto, fue para manifestarse sus afectos, para ratificar su amistad y para disculparse por los excesos cometidos en el pasado que tensaron la relación familiar, como aquella frase de “jefazo” que tanto escarnio provocó y que colocaba al en ese momento candidato a gobernador del estado, como un chinguetas.
Para comentar la situación complicada en el estado y de refilón, para poder comentar algunos escenarios. Manuel Añorve, seguro de sí mismo bromeo y sin conocer el detalle de la plática, le propuso que ante cualquier circunstancia, seguirán siendo amigos.
El escenario neutral, la circunstancia compleja para el gobernador, su familia y sus aspiraciones. Comida de por medio, revisaron la complejidad de un sinnúmero de eventos, como las comparecencias de Zeferino y funcionarios, entre otras cosas, que empiezan a dibujar un escenario de crisis en el estado.
Quien solicitó la plática, fue el gobernador en turno. Manuel solicitó que no fuera en Casa Guerrero o en oficinas de gobierno de Acapulco y que se manejara con discreción la cita, cosa que al final, no se logró.
La lectura que tengo del evento, es que hay una elevada preocupación del actual gobernador del estado de Guerrero, por el avance de la inseguridad, los escenarios complicados sobre la violencia que han impuesto los grupos de la delincuencia organizada y que los 4 años 8 meses de su mandato constitucional, han sido insuficientes para poder hacer algo mejor.
No hay derrota del actual Ejecutivo, pero es evidente que está solicitando al primo, al amigo, del que se burló en la pasada campaña, para que sea interlocutor con Beltrones y con otros actores políticos del Partido Revolucionario Institucional (PRI), luego de que nadie le recibe la llamada.
Aguirre Rivero, vive en este momento su Waterloo en el estado de Guerrero, solo, cansado y con muchas ilusiones, pero sin ninguna condición de terminar bien su periodo constitucional, por el desbarajuste administrativo en que se encuentra. Grita auxilio y quizá el primo Manuel Añorve Baños, le tire un salvavidas. Quizá lo hunda más. No sé.
No hay comentarios:
Publicar un comentario