Critican politécnicos el desempeño del gobierno aguirrista ante desastres naturales
Egresados del Instituto Politécnico Nacional (IPN) criticaron la falta de previsión de autoridades para atender la emergencia generada por la tormenta Manuel. Lejos de prevenir a la población del desastre natural, señalan que el gobernador del estado Ángel Aguirre Rivero, se puso a beber con sus cuates en Casa Guerrero, mientras más llovía y llovía, el gobernador más bebía y bebía.
En reunión con el rector de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Javier Saldaña Almazán, los miembros de la Comunidad Politécnica de Acapulco propusieron crear las especialidades en protección civil y desastres naturales.
Reprocharon que el gobierno nunca ha hecho caso a sus propuestas, y subrayaron que muchas de las desgracias ocurridas a partir del 14 de septiembre pasado en Acapulco habrían podido evitarse.
La química Magdalena Mata expresó que las primeras inundaciones en el puerto ocurrieron en 1961 debido al a construcción de la avenida Farallón y la glorieta de La Diana, pues se obstaculizó el cauce de varios arroyos que descendían de la parte alta.Criticó que “nunca nos han hecho caso”.
El ex presidente de la Comunidad Politécnica en el puerto José Luis Sánchez Ortiz expresó que las inundaciones fueron causadas por intereses políticos e invasiones.
Criticó que el municipio no cuente con un tiradero de desechos de la construcción. Manifestó que es hora de que los gobiernos hagan respetar los reglamentos, así como la vía pública.
Planteó la necesidad de retomar el Instituto Municipal de Planeación.
El coordinador de Proyectos Especiales y ex vicepresidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Guerrero, Hugo Arizmendi Herrera, recalcó que los culpables de las inundaciones ocurridas en Acapulco tienen nombre y apellido, por lo que la autoridad debe de actuar.
El químico Joel García Lozano mencionó que el IPN ha participado en el desarrollo de investigaciones contra el paludismo y el bocio, por medio de la Escuela de Medicina Rural.
Víctor Sandoval Cruz expresó que la autoridad no estaba preparada para combatir enfermedades relacionadas con las lluvias, y advirtió que “viene lo peor”.
El rector de la UAG insistió en la formación de un centro estatal de prevención de desastres, en el que participe un grupo multidisciplinario de trabajo, en el cual se genere investigación y capacitación, que dé seguimiento a los fenómenos naturales y se integren registros históricos de lluvias, sismos, redes de contingencia y la formación de un atlas de riesgos, que no existe en la entidad.
Javier Saldaña Almazán enfatizó que “si los académicos no hacemos nada, nos va a pasar un susto”, y convocó a catedráticos, investigadores, empresarios y sociedad civil en general a integrar un centro de prevención de desastres.
Manifestó que “estamos en pañales; lo peor es que no aprendemos”, y criticó que el actual gobierno municipal haya designado al mismo director de Protección Civil municipal que estaba cuando ocurrió el huracán Pauline, en 1997, Efrén Valdés Cortés. Comentó que algunas carreras que podrían abrirse serán Técnico Superior
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