Ya no sabe uno a quien temer más, si a la delincuencia organizada o a la policía desorganizada…
¿Quién da más miedo, un delincuente o un policía con la cara cubierta por pasamontañas…?
La respuesta es general: el policía…
Un integrante de cualesquiera de los cuerpos de seguridad del gobierno puede acabar con la vida de un ciudadano que no cumpla sus caprichos o sus órdenes simplemente señalándolo de drogadicto y “sembrándole” la droga…
Un delincuente lo puede robar pero hasta ahí…
El Presidente del país acaba de “inaugurar” la llamada Gendarmería. No es otra cosa que la misma gata nomás que revolcada…
¿Hay buenos policías? ¡claro que sí!, los hay magníficos, con orgullo de ser policías, con entrega y pasión pero son los menos y la delincuencia avanza de manera brutal oprimiendo al ciudadano que entre los ingresos cada vez más bajos y la inseguridad, nada más se desespera cuando voltea a ver al gobierno que debiera garantizarle su seguridad y se encuentra con ese silencio ensordecedor…
También pasa que la policía está para cuidar el orden y esto es un desorden, por eso es que no les corresponde actuar...
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